La cantautora británica Pip Lewis, radicada en San Diego, se prepara para el lanzamiento de su nuevo sencillo Dead Ringer, disponible como adelanto de su próximo álbum Growing Pains. Con tan solo 22 años y más de una década de experiencia musical, Pip ha desarrollado un sonido introspectivo y etéreo.
Dead Ringer nació de su fascinación por los icónicos ritmos de los años 80, particularmente el intro de batería de Blue Monday de New Order. Inspirada por el sonido de la legendaria Linn Drum Machine, utilizada en éxitos de Prince y Queen, la artista dio forma a este tema que fusiona nostalgia y una exploración profunda sobre la identidad. La canción plantea preguntas sobre la dualidad entre el artista y la persona detrás del escenario.
Pip reflexiona sobre cómo el sufrimiento y el espectáculo a veces se entrelazan, influenciada por su infancia viendo con su padre las intensas presentaciones de Ian Curtis de Joy Division, cuyas crisis epilépticas en el escenario se confundían con su enigmática expresividad. Dead Ringer es más que un homenaje al sonido de los 80; es una exploración de los límites entre la autenticidad y la imagen artística. Con Growing Pains, Pip Lewis promete un viaje sonoro que conecta emoción, memoria y experimentación.
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