Del Jardín y la alquimia sonora de Veneno

La banda chilena Del Jardín continúa expandiendo su universo musical con el lanzamiento de Veneno, un single que forma parte de su álbum Ilusiones de Sueños Olvidados y que se sumerge en una atmósfera introspectiva y psicodélica.

Inspirada en una vivencia personal de Vicente Sáez—vocalista y guitarrista del grupo—durante un ritual chamánico en las montañas de San Pedro de Atacama, la canción explora los efectos transformadores de una sustancia ceremonial que detonó visiones, emociones profundas y una conexión con lo intangible. Veneno se plantea como un viaje interior que confronta el vértigo de lo desconocido, un manifiesto del poder oculto que habita en lo invisible y que, desde lo sonoro, toma forma en texturas densas, melodías envolventes y una lírica cargada de simbolismo.

El proceso creativo fue tan espontáneo como visceral: concebida en tan solo cuatro horas por el propio Sáez, la canción se grabó en colaboración entre estudios nacionales como Baleares y Animal de Radio, y también de forma remota con su baterista en Alemania, Alberto Atalah. El sonido, cargado de emocionalidad y guiado por la intuición más que por fórmulas convencionales, captura tanto la espiritualidad del ritual como la inmensidad del paisaje altiplánico que lo inspiró. Del Jardín demuestra que es posible traducir experiencias místicas en canciones honestas, crudas y vibrantes, que no solo invitan a escuchar, sino a sentir desde lo más profundo.

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