Hombre Máquina se estrena en la escena con Uno: la imperfección como parte esencial del proceso creativo

Luego de tres décadas marcando el pulso de proyectos emblemáticos, el baterista colombiano Roberto Gil da un giro audaz y presenta su proyecto solista: Hombre Máquina. Este nuevo capítulo inicia con el lanzamiento de Uno. La canción es una pieza visceral y honesta que abraza la imperfección como parte esencial del proceso creativo.

Grabada y posteriormente reconstruida desde una nueva perspectiva, Uno combina una base rítmica poderosa con guitarras distorsionadas y una voz melódica que remite al rock alternativo de los 2000. El resultado es un sonido crudo, auténtico y emocionalmente cargado, que se vuelve aún más íntimo con la inclusión de la voz de su madre, recitando un mensaje que ha acompañado a Roberto a lo largo de su carrera. Hombre Máquina no es solo un nombre: es una filosofía que explora la dualidad entre lo espiritual y lo físico, y cómo la tecnología puede ser una extensión de nuestra expresión artística. Este proyecto unipersonal nace de años de preparación, en los que Gil se sumergió en el estudio de composición, guitarra, piano y canto para plasmar su visión sin intermediarios.

Su música, una mezcla de rock progresivo y alternativo, busca iluminar conceptos como el arte, el amor y la conciencia, funcionando como una linterna que guía a través de la complejidad emocional y filosófica de la experiencia humana. Con una trayectoria que incluye colaboraciones en bandas como Evelin, Foam, La Concepción de la Luna y Delta, y presentaciones internacionales en Colombia, Roberto Gil inicia “el resto de su vida” con una propuesta que desafía géneros y expectativas. Uno es el primer paso de un viaje que promete ser tan introspectivo como poderoso, y que invita al oyente a conectar con su propia espiritualidad, vulnerabilidad y deseo de transformación. Hombre Máquina es arte en estado puro: imperfecto, humano y profundamente necesario.

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