#Reseñas: Las Calles Vacías se entrenan con su disco debut homónimo
- Jose Angel Rincon
- 6 dic
- 2 Min. de lectura

El cuarteto chileno Las Calles Vacías finalmente ve la luz con su primer álbum homónimo, resultado de un intenso trabajo que cristaliza en una propuesta vibrante y frenética. Desde el inicio, el disco descarga una energía única, moviéndose entre el power pop y el sonido indie, con guitarras que marcan el pulso y que oscilan entre lo ruidoso del garage y lo melódico.
La incendiaria introducción de Dime Dónde Estás abre el camino hacia Solano, tema que establece de inmediato el tono del proyecto: un encuentro entre la fuerza sonora y la introspección lírica, en este caso, la soledad personal. El recorrido continúa con El Cuadro, que equilibra melodía y reflexión profunda, mientras El Salto aporta mayor dinamismo instrumental y habla sobre la importancia de pensar antes de tomar decisiones apresuradas. La Plaza de los Aburridos funciona como un recuerdo de días pasados, narrado con vividez y nostalgia. Por su parte, Banderas Blancas se acerca más al pop, con un mensaje sobre reinicios y la necesidad de aprovechar las oportunidades que se presentan.
Cada canción aporta un matiz distinto, consolidando un álbum que se mueve entre lo íntimo y lo explosivo. Uno de los momentos más intensos llega con Cada Madrugada, un tema de sonido contundente que retumba en la cabeza y se distancia del resto del disco por su carácter más visceral. En Serio nos devuelve al power pop noventero, recordándonos que a veces es necesario darle la vuelta a las cosas y enfrentarlas con firmeza. El cierre llega con Huemul, cargado de aire reflexivo, y Ni Uno, que aporta una energía vintage y deja claras las intenciones creativas de la banda. Este desenlace reafirma la diversidad y la madurez artística del grupo en su debut.
Las Calles Vacías, integrado por Cote Miranda, Nico Rivera, Mati Delgado y Nico McFly, se nutre de influencias del rock de los ‘90 y los 2000, explorando nuevos ritmos con sonidos contemporáneos que retratan la cotidianidad desde Santiago de Chile. Su álbum debut gustará a quienes disfrutan del power pop clásico y de un toque vintage, con una producción que evita lo pulido para apostar por lo orgánico. Escuchar el disco es una experiencia intensa, pero todo indica que en vivo la banda lleva estas canciones a otro nivel, convirtiendo sus conciertos en una cita imperdible para los amantes del rock alternativo.
ESCUCHA SU MUSICA EN EL PLAYLIST DE EN TIJUANA HAY ROCK








Comentarios